Este artículo originalmente apareció en mi libro El arte de perder.
Un error en el que caemos cuando nos desesperamos por no ver resultados inmediatos es el de juzgarnos antes de tiempo.
Es decir, que emitimos un juicio final sobre nuestra habilidad en cierta disciplina sin darnos la oportunidad de explotar todo nuestro potencial.
Es irrazonable juzgarte antes de tiempo, porque necesitas que tus habilidades maduren, y ese proceso toma tiempo.
Lo que hace que un creativo destaque en un área es darse el tiempo y la oportunidad de madurar para que sus distintas habilidades empiecen a conversar entre ellas, y se consoliden.
Normalmente, al juzgarnos nos comparamos con personas que van más avanzadas en su proceso que nosotros, y eso nos puede desmotivar.
Sin embargo, entender que esas personas y tú están en diferentes partes del proceso de crecimiento es esencial, porque implica que ellas estuvieron en tu lugar, y por lo tanto tú algún día puedes estar en un lugar similar al suyo.