Este artículo originalmente apareció en mi libro El arte de perder.
Las conversaciones incómodas son señales de que en la vida de esa persona hubo progreso, de que no se quedó estancada en una situación o problema, y que tuvo el valor de enfrentarla y salir adelante.
El autor Ryan Holiday dice que el éxito de una persona se puede medir por la cantidad de conversaciones incómodas que ha tenido a lo largo de su vida.
Las conversaciones incómodas son señales de que en la vida de esa persona hubo progreso, de que no se quedó estancada en una situación o problema, y que tuvo el valor de enfrentarla y salir adelante.
Lo peor que podemos hacer si buscamos una vida plena, es quedarnos estancados en algo en lo que no estamos cómodos.
Inevitablemente nos toparemos con situaciones en las que nos sentiremos atrapados y frenados, y muchas veces la única forma de salir de ellas es teniendo una conversación incómoda.
Es aquí cuando estas pláticas se convierten en cicatrices de guerra y recordatorios de que abandonamos una vida en la que no éramos felices, y fuimos por una vida en la que sí.
Por eso, si te sientes atrapado, analiza si estás a una conversación incómoda de liberarte.
Si la respuesta es sí, ten esa conversación lo antes posible.