Este artículo originalmente apareció en mi libro Creativo: 100 consejos para vivir de tu arte.
En la vida, las limitaciones no son barreras que te impiden hacer tu trabajo, sino que todo lo contrario.
Son bendiciones que te ahorran la carga mental necesaria para tener que elegir qué limitaciones debes de tomar. Porque para hacer algo realidad, tienes que limitarte a eso que elegiste hacer.
Así que bajo esa perspectiva las limitaciones no son desventajas, sino oportunidades para ahorrarte ese proceso de elección y concentrarte en lo que más importa de tus obras: sus propuestas.
Las limitaciones no te dicen qué hacer ni cómo hacerlo, te muestran las reglas del juego que debes de seguir, pero dentro de ese contexto tú eres libre de jugarlo como quieras. Son solo una manera de darle orden y estructura a tus ideas.
Así que agradece tus limitaciones, prospera y juega de la mejor manera bajo las reglas que te tocaron o que escogiste.
Conviértete en un crack de tu juego, pues tu disciplina necesita un nuevo Lionel Messi, Tiger Woods o Gari Kásparov. Ponte a trabajar.